"To my widow..."

Este fue el título de la última carta que escribió Robert Scott a su esposa.
Era 17 de Enero de 1912, y el capitán Scott y sus hombres derrotados tras averiguar que la expedición noruega les había ganado la conquista del Polo Sur, intentan regresar al campamento base.
El 20 de marzo de 1912 anota en su diario:

"Ya toda esperanza debe ser abandonada. Esperaremos hasta el fin, pero nos debilitamos gradualmente; la muerte no puede estar lejos..." luego sus últimas palabras: "¡es espantoso, no puedo escribir más!

Sabía que lo único que le quedaba era la muerte.