En tiempo de prodigios

Sin duda, este libro finalista del Premio Planeta 2006, debía haber sido el ganador. Pero ya sabemos como funcionan estas cosas.
No importa, esta novela es una lección de encaje fino, dos historias que navegan paralelas, el pasado y el presente.
Dos historias que nos explican el vacío que puede dejar una persona a la que queremos que nos deja antes de hora, sin poder despedirnos de ella y la necesidad de contar una historia tejida con las fotos antiguas de una caja de galletas.
Es una historia llena de emociones, de ausencias, de tristeza y alegría, de reencuentros, de viajes, de secretos, sin duda, una novela que me costará mucho tiempo olvidar, porque me ha llenado de buenos momentos.